En el CPEM 67 de Centenario la comunidad educativa vivió un viernes tenso tras la denuncia de una madre sobre una golpiza a su hija a pocas cuadras de la escuela y el relato de que sufría bullyng desde hace años. Horas después, por la tarde la llegada de personal policial de la Comisaría 52 y gritos que se podían apreciar causó aún más preocupación.
Es que en el lugar los efectivos junto a directivos y la seguridad de la institución debieron actuar con mucha cautela ante el aviso de que uno de los estudiantes, menor de edad, tenía en su poder un arma.
Tras una inspección exhaustiva detectaron que en la mochila de una alumna una pistola de aire comprimido, antes procedieron a que los presentes estuvieran a resguardo. La misma fue secuestrada para su posterior peritaje.
Por el hecho intervino la Unidad Fiscal de Delitos Juveniles a cargo del Dr. Carlos Gómez. Fue iniciada una causa por lo ocurrido y la madre del menor informada sobre la situación.