El intendente Esteban Cimolai recorrió el martes 23 junto al secretario de Agua y Saneamiento, Luciano Nagli, la obra de sumidero que comenzó la semana pasada en barrio Vista Hermosa, para derivar líquidos cloacales a la red, que actualmente provienen de los asentamientos de la segunda meseta.
Nagli explicó que “estos líquidos se filtran hacia abajo y son los que provocan el derrame constante en este sector”, en referencia al tramo en forma de “L”, donde se cava una profunda canaleta que recorre desde Los Onas y El Salvador, prosigue en calles El Salvador y Goebel, y de allí hasta calle Cuba.
La obra lleva un 20% de ejecución, con una inversión de 70 millones de pesos. Estará finalizada a fines de agosto. La previsión de un segundo sumidero y su localización va a surgir del resultado de la corrección de las obras y el funcionamiento del sistema. El sistema de sumidero intercepta los cursos de líquidos y los conduce hacia la red conductora cloacal. Esta gestión adecuada de los sumideros cloacales es crucial para proteger la salud pública y el medio ambiente.
Cimolai explicó que “por supuesto, la solución de fondo siempre es la construcción de redes cloacales, pero para dimensionar el problema, estamos hablando de un costo aproximado de 5 mil millones de pesos, solo en la segunda meseta, que serían 60 kilómetros lineales de red cloacal”. Mientras no consigamos financiamiento, tenemos que ir haciéndolo de a poco”.
