La madrugada del domingo 08 en Centenario tuvo operativos de tránsito sorpresivos a lo largo de la calle Belgrano y en Marcial Bravo y San Juan Bosco, en la zona del Casco Viejo . Hubo varias situaciones tensas en lo que primero parecía ser uno más de los controles que se han realizado.
Seis autos y dos motos fueron secuestradas, la mayoría por alcoholemia positiva de sus conductores, siendo el valor mas alto detectado 1,86 gramos informó a CD el director de Tránsito del municipio, Carlos Torres. También labraron 22 actas contravencionales y retuvieron seis licencias.
Hubo intentos de fuga que motivaron a persecuciones y un caso muy particular con un hombre que primero no quería descender de su camioneta cuando lo pararon.
Iba a bordo de una Citroën Berlingo blanca y tras negarse a bajar discutió con inspectores municipales, personal de la Agencia de Seguridad Vial y efectivos policiales de la Comisaría Quinta a cargo del subcomisario Julián Valenzuela, hasta que lo hicieron descender y entró en razón.
Luego no pudo en tres ocasiones seguidas realizar el test de alcoholemia, presentaba un fuerte aliento etílico y según reiteraba solo había tomado una cerveza y era hermano de un policía. En esas condiciones pretendía transitar hasta la zona de parcelas de la ciudad, un familiar debió ir buscarlo luego de que lo multaran y le secuestraran la camioneta y la licencia.
Todos los vehículos secuestrados fueron llevados al depósito municipal. Durante los controles también hubo conductores que transitaban por Antártida Argentina o Río Neuquén y al advertirlo daban marcha atrás y se retiraban a toda velocidad para evitarlos.