En las últimas horas el municipio de Centenario le puso fin a dos aguantaderos de trapitos en el Barrio Sarmiento y en el barranco ubicado frente a la primera rotonda de la Ruta 7. Allí personas en situación de calle y delincuentes se habían instalado y causaban inconvenientes con los vecinos.
En un terreno abandonado de la calle Mariano Moreno, a metros de Roca, ocultaban elementos robados y además se habían registrados disparos varias madrugadas. Las familias de la zona estaban muy preocupadas por ello porque era una zona tranquila donde todos se conocen, esto hasta la llegada de desconocidos que se instalaron y alteraron la paz del vecindario.
Solicitaron respuestas al Consejo de Seguridad del municipio y al Concejo Deliberante. El pasado viernes con una acción concreta junto a personal de Limpieza Urbana y efectivos policiales de la Comisaría Quinta el lugar fue desmantelado, sacaron una gran cantidad de residuos y hasta artefactos eléctricos.

Lo mismo sucedió frente al edificio del Patrimonio Histórico y Cultural, a la vera de la Ruta 7, donde retiraron carpas, nylons y otros elementos. Hacia este lugar escapaban sujetos con pertenencias robadas en viviendas del Casco Viejo según se pudo determinar.
