En las calles 6 y 20, zona de chacras de Centenario, un grupo de chacareros se plantó el lunes 17 por la tarde cuando una empresa a cargo de una obra de recambio de cañería anunciada por el municipio instaló un caño para el vertido de líquidos cloacales hacia el desagüe, esto con previa autorización del Consorcio de Riego y Recursos Hídricos.
Pero lo que reclamaban es que esto debía ser tratado por una especie de mini planta con sanitizante antes de ser arrojado. Al lugar también había llegado la secretaria de Ambiente, Alicia Manucci, quien intentó dar explicaciones acerca de lo que se iba a realizar. El enojo fue escalando ya que dos de los presentes, Jose Crljenko y Marta Asaad, chacareros de la calle 20, sostenían que padecen de una acumulación ce líquidos cloacales desde septiembre del año pasado y que hay una contaminación constante en el acceso a su chacra.
Si bien hubo una reunión con funcionarios municipales mencionaron estar cansados de lo que padecen y el enojo también fue transmitido a los concejales Lucía Matas y Sebastián Krapp, quienes se acercaron al lugar a verificar lo que ocurría.
Ya entrada la noche el vertido de líquidos ya no se realizaba y también otros funcionarios como Alfredo Valenzuela, subsecretario de Agua y Saneamiento, y Eugenia Jafella, secretaria de Planificación y Ordenamiento Territorial, arribaron. También el primero mantuvo un cruce con uno de los vecinos respecto a los papeles de la obra y las autorizaciones.
Cerca de las 22 Policía de Comisaría Quinta fue alertada por los presentes por lo que ocurría. Los efectivos que llegaron entrevistaron a las partes y la situación fue informada a la Fiscalía de Delitos Ambientales, ante esto la Dra. Campos dispuso que los trabajos se paralicen.
Este martes por la mañana las autoridades judiciales llegarán a ese sector rural para verificar la situación más allá de lo constado por el personal policial.
