El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) inauguró una Oficina de Certificación de Productos Cárnicos en el Depósito Fiscal y Aduanero de Centenario, que opera desde 2014. La medida representa un paso clave para dinamizar las exportaciones de la región, en especial de productos acuícolas.
Hasta el momento, la certificación de truchas y otros productos cárnicos solo podía realizarse en San Antonio Oeste y San Carlos de Bariloche. Con esta apertura, se amplía el servicio que ya existía para frutas frescas y se habilita la certificación local, reduciendo costos y tiempos de traslado.
La coordinadora general de Certificación e Información de Senasa, Andrea Bravo; el director regional, Ricardo Sánchez; el coordinador de Inocuidad y Calidad Agroalimentaria, Ariel Martín, y la gerente comercial del Depósito Fiscal, Natalia Muguerza, participaron de la recorrida inaugural.
En una primera etapa, el control será realizado por un veterinario del organismo junto con personal de Aduana dentro del depósito. Luego, en el Aeropuerto de Neuquén, se verificará la carga refrigerada antes de embarcarla en vuelos internacionales, asegurando la inocuidad y calidad de los envíos.

El nuevo esquema agilizará la logística: antes, el proceso podía implicar demoras de hasta 24 horas para llegar a Ezeiza. Ahora, los envíos podrán salir directamente desde Neuquén hacia los principales mercados, entre ellos Estados Unidos y Japón.
Además, la empresa a cargo del depósito proyecta acreditarse como “dador de frío”, lo que permitiría concentrar en un solo punto los trámites aduaneros y la certificación final, ampliando la capacidad exportadora a otras carnes de la región.
Con esta medida, el Senasa busca descentralizar procesos, potenciar el comercio exterior y fortalecer la producción patagónica, sumando al sector acuícola al circuito de certificación frutícola que ya se desarrolla en la zona.
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