En una audiencia de revisión de las medidas cautelares realizada el viernes 05, el asistente letrado Pablo Jávega requirió que un hombre, declarado responsable por intentar asesinar a un mujer que se encontraba en un local comercial en la zona de Parcelas de Centenario, continúe detenido en prisión preventiva.
Durante la audiencia, el funcionario explicó que el 5 de abril de este año se realizó la formulación de cargos y que en ese momento se dictó la prisión preventiva por 6 meses. Ante el vencimiento de la medida cautelar, Jávega requirió la prórroga por dos meses más, “a los fines de asegurar los fines del proceso y que pueda ejecutarse la condena”.
El pedido estuvo fundado en que subsiste el riesgo de fuga, de entorpecimiento y de integridad para la víctima, y que la pena que le corresponde cumplir será de efectivo cumplimiento. “Hubo una progresividad en hechos de violencia del imputado hacia la víctima. La mujer no denunció por temor”, indicó.
El representante de la fiscalía agregó que en septiembre, mediante un acuerdo entre las partes, el sujeto, de iniciales M.D.C.M, aceptó su participación en el hecho y se acordó la responsabilidad por el delito de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa. De acuerdo con la sentencia de responsabilidad, “el motivo que existió detrás del hecho es la negativa de la víctima de continuar manteniendo relaciones sexuales como lo había hecho con antelación, con una retribución en drogas para consumo”.
Tras escuchar a las partes, el juez Luis Giorgetti consideró el riesgo de entorpecimiento de la investigación y la necesidad de proteger a la víctima e hizo lugar al pedido de prórroga de la prisión preventiva planteado por el funcionario.
El hecho
De acuerdo con la teoría del caso, el imputado cometió la agresión el 4 de abril, aproximadamente a las 11, en un sector de comercios de las Parcelas de la localidad de Centenario. En ese momento, M.D.C.M, que vive en cercanías del local, se presentó a bordo de un vehículo y comenzó a increpar a la víctima, a quien intentó golpear y le recriminó que le había dicho que no quería verla más en el lugar.
La mujer respondió a los golpes y el propietario del comercio salió a la vereda para interceder, pero el imputado se dirigió al auto, tomó un arma calibre 32 y volvió diciendo que la iba a matar. La víctima se refugió entonces en una casa contigua y el disparó al menos en tres oportunidades, sin lesionarla.